El autor ha llamado a este libro de cuentos y relatos su “pequeño bestiario personal”. Justo nombre para esta serie de historias que dejan entrever sus influencias literarias más entrañables y más cercanas. Hay aquí rastros innegables de Cortázar, nombrado y evocado, releído y admirado, pero también de los mitos y leyendas que poblaron sus lecturas juveniles; de la inmersión en la naturaleza que le acercaron los cuentos de Quiroga o de las fábulas naturalistas que remiten a las lecturas escolares de toda una generación.
Y sin lugar a dudas, hay además mucho de lo propio; de esa actitud de quien se acerca a los niños o los jóvenes, ya sean discípulos o pertenezcan a esa otra clase de alumnos tan especial que son los hijos, para repetir el gesto más antiguo: el que congrega al grupo ante el narrador de historias.
Ángel Pinedo es, en esta etapa de su evolución como escritor, precisamente eso: un narrador de historias; y nosotros, a partir de este momento, sus oyentes cautivos.
Ángel Pinedo es, en esta etapa de su evolución como escritor, precisamente eso: un narrador de historias; y nosotros, a partir de este momento, sus oyentes cautivos.
DORA DI SARLI (Editora de Puente del Sur Ediciones, Licenciada en Letras de la UBA)